"Linnaeus, El padre de la clasificación taxonómica, había determinado a finales del siglo XVIII, que todos los humanos pertenecían a la misma especie, homo sapiens, "hombre sabio" en latín. Pero cubrió los riesgos de su hipótesis distinguiendo cinco subespecies, que identificó como afer (africanos), amaricanus (americanos nativos), asiaticus (Asiáticos), europaeus (europeos) y Y por último, a manera de comodín un taxón, monstrosus, que incluía fundamentalmente a todos los demás, todos los pueblos tan extravagantes a ojos europeos que desafiaban una clasificación..” (Davis, 2015)
Tanto para el hombre blanco como para los indígenas lo que les parece anormal es decir diferente a ellos o semejante en características físicas a un animal lo asocian con lo “diabólico”;”los indígenas son imberbes” (Gutiérrez, 1873:17) por lo cual encuentran al escribiente equivalente al “coco”, sin embargo el tono con el cual lo escribe Alba es muy divertido y no logró equiparar la comparación de los indígenas del escribiente con el coco, con las descripciones otrerizantes que hace tanto de los indígenas como de los “negros”; sin embargo es posble identificar que el “otro” son ambos.
Un cuerpo "diabólico"
"Pedro particularmente ha prestado grandes servicios al gobierno de Colombia, dándole noticias detalladas sobre las regiones desconocidas que nominalmente corresponden a su territorio, atravesando por orden del mismo gobierno, comarcas despobladas enteramente, o habitadas sólo por indios salvajes, tanto o más temibles que las mismas fieras, y dirigiéndose por selvas y ríos desde Pasto a Bogotá..." (Gutiérrez, 1873)
"Otra de las cosas que llamaron también nuestra atención fue el ver a todos ellos con la ternilla de la nariz, las orejas y los labios perforados, para adornarse con pedazos de caña, huesos de cuadrúpedos, aves o peces, y plumas de vistosos colores, que unidos a las rayas negras o rojas con que se pintan el rostro, los brazos y las piernas, y a los adornos de sartas de cuentecillas de vidrio, generalmente blancas y azules, que es su ornamento más estimado, y que suelen llevar con predilección en forma de pulseras, ajorcas y gargantillas, con algunos dientes de mono, tigre o caimán como complemento, hacen un conjunto diabólico, donde sólo puede encontrar algún género de belleza su extravagante y rara fantasía." (Gutiérrez, 1873)
" Uno de los naturales había madrugado a embadurnarse el rostro con la tinta de que hacen tan frecuente como lamentable uso, de tal manera, que a cierta distancia su cara parecía, más que un rostro humano, un enorme pimiento maduro de los que se producen en España en diferentes localidades, principalmente en La Rioja. Viéronnos pasar cerca de ellos con más curiosidad que extrañeza, y cuando nos alejamos un poco, volvieron a entregarse a su trabajo." (Gutiérrez, 1873)
"La larga y espesa barba de mi escribiente, era uno de los objetos que más llamaban su atención, y que examinaban con mayor ahínco. Encontrábanle alguna semejanza con un mono bermejo, llamado vulgarmente mono cotudo, a quienes ellos denominan emúr, palabra que corría de boca en boca, mientras se hacía el examen de la barba. Lloraba a la sazón uno de los muchachos indígenas, sin que hallasen medios de hacerle callar, cuando a su padre se le ocurrió la idea de convertir en coco a mi escribiente; tomólo de la mano; llevólo al lugar en que el muchacho lloraba, y se lo presentó como un objeto de espanto. El muchacho fijó en él por un momento sus asombrados ojos; ocultó como pudo la cara entre el seno de su madre, y no volvió a chistar en todo el tiempo que estuvimos en la Laguna. Consecuencia: mi escribiente servía para algo más de lo que yo me figuraba." (Gutiérrez, 1873)
"Durante la tarde se adornaron todos lo mejor posible con sus chaquiras, plumas vistosas y hojas aromáticas; pintáronse el rostro con la tinta roja como de costumbre, y se afanaban mucho en teñirse de negro labios y dientes, lo cual daba a la mayor parte de ellos un aspecto tan repugnante como asqueroso." (Gutiérrez, 1873)
Indígenas relatados como animales que pueden vivor en un territorio enfermo; los hombre "negros" como puente entre ese mundo "salvaje" y el "civilizado"
Es muy interesante como para él es supremamente importante nombrar la Raza antes que el nombre, la profesión, es un forma repetitiva en la cual el describe las personas menos si son "civilizados" es decir hombres blancos, no los nombra como hombres blancos